A veces sobran las palabras.
Estas fotografías tienen un componente "oscuro" que en estos tiempos que corren, en los que la violencia alcanza altas cotas de notoriedad, no necesitan demasiada explicación.
A cada uno les sujerirá algo distinto, aunque una cadena oxidada, que acaba en curvo gancho afilado, a mí por lo menos me lleva al submundo que denuncia Siegg Larsson en "Los hombres que no amaban a las mujeres". Novela, que al igual que la segunda de la serie Millenium; "La chica que soñaba con un bidón de gasolina y una caja de cerillas" devoré en un santiamen cuando cayeron en mis manos.
Pura adición adrenalítica.
Muy buenas fotos, enhorabuena. Estuve en el estand de Venus en Cevisama, es inconfundible desde luego. Un saludo desde Onda
ResponderEliminarGracias por tus palabras, que se convierten en ánimos para continuar con esto de la fotografía. Cuando tenga tiempo me daré gustosamente una vuelta por Venecia ;-)
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